Biden bajo presión por los niños que cruzan la frontera con México
La administración Biden está respondiendo a las críticas por su forma de afrontar la gran cantidad de niños migrantes que llegan a la frontera sur de los Estados Unidos, diciendo que está trabajando para reconstruir un sistema de asilo que fue desmantelado por el ex presidente Donald Trump.
En una entrevista el domingo con el programa ABC News This Week, el secretario del Departamento de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, reconoció que la afluencia de niños no acompañados presenta un desafío.
“¿Por qué es especialmente desafiante y difícil ahora? Porque todo el sistema bajo la ley de los Estados Unidos que ha estado vigente… fue desmantelado en su totalidad por la administración Trump”, dijo Mayorkas.
«Así que estamos reconstruyendo el sistema a medida que abordamos las necesidades de los niños vulnerables que llegan a nuestras fronteras».
En una entrevista con la CNN el domingo, Mayorkas dijo que Estados Unidos planea abrir nuevas instalaciones para albergar a los menores no acompañados que han cruzado al país en las últimas semanas. No proporcionó un plazo exacto ni más detalles.
El presidente Joe Biden, quien asumió el cargo en enero, prometió deshacer algunas de las políticas antiinmigrantes de su predecesor, incluido el levantamiento de la llamada «prohibición musulmana» y otras medidas de línea dura que llevaron a la separación familiar.
Pero los funcionarios de la administración de Biden dijeron la semana pasada que están llegando más inmigrantes a la frontera entre Estados Unidos y México que en los últimos 20 años.
La situación ha provocado críticas de los republicanos, que culpan a las políticas de inmigración de Biden por el aumento de llegadas, así como de legisladores progresistas y defensores de la inmigración, que dicen que Estados Unidos debe hacer más para proteger a los migrantes vulnerables y darles un camino real hacia el asilo.
CBS News informó el sábado que el gobierno de EE.UU. retenía a unos 15.500 niños migrantes no acompañados, incluidos 5.000 que habían quedado varados en instalaciones fronterizas que no eran adecuadas para la detención a largo plazo.
«Según los registros del gobierno, los niños no acompañados pasan un promedio de 136 horas bajo la custodia de CBP, mucho más allá del límite de 72 horas establecido en la ley de Estados Unidos», dijo la CBS.
El gobierno de Biden ordenó este mes a la agencia federal que normalmente se ocupa de desastres naturales como inundaciones y huracanes que ayude a cuidar a los menores no acompañados.
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El Centro de Investigación Pew dijo que las autoridades estadounidenses encontraron 18.945 familiares y 9.297 niños no acompañados en febrero, un aumento del 168 por ciento y 63 por ciento, respectivamente, en comparación con el mes anterior.
Pero la detención de niños migrantes ha suscitado una preocupación particular entre los abogados y otros defensores de los migrantes, algunos de los cuales han podido evaluar las condiciones en los centros de detención.
La semana pasada, Associated Press informó que las autoridades estadounidenses habían suspendido a los recién llegados a un campamento para trabajadores de campos petroleros en el estado de Texas que se había convertido para albergar a adolescentes migrantes.
Se han planteado dudas sobre la seguridad en el sitio, después de que más del 10 por ciento de los niños detenidos allí dieran positivo por COVID-19 y al menos un niño fue hospitalizado, dijo la agencia de noticias.
En otra instalación, algunos niños dormían en el suelo mientras que otros no tenían acceso a una ducha durante cinco días, informó AP.
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