Un solo año de cárcel para un hombre que agredió sexualmente a una prostituta
La Audiencia de Alicante ha confirmado la pena de un año de prisión y una indemnización de 600 euros a un hombre por agredir sexualmente a una mujer que ejercía la prostitución.
La condena de un año de prisión es la más baja que contempla el delito de agresión sexual, que va de uno a cinco años de prisión. La sentencia acredita que en septiembre de 2018 el condenado recogió en coche a la mujer en la avenida de Antonio Ramos Carratalá de Alicante mientras estaba trabajando.
Una vez hubo arrancado, le dijo que sólo tenía «unos dos euros», del todo insuficientes para pagarle, por lo que la mujer le dijo que diera la vuelta y la dejara allí donde la había recogido, pero el condenado la ignoró y continuó conduciendo, mientras ponía la mano entre los muslos haciéndole tocamientos en contra de su voluntad.
El hombre continuó conduciendo hasta una calle apartada e insitió a la mujer «que le hiciera el servicio», según la sentencia. Finalmente, la mujer logró escapar tras un forcejeo en el que el agresor la agarró del brazo y pidió ayuda a una patrulla de la policía local.
Posteriormente denunció los hechos, que permitió que el hombre fuera condenado en primera instancia, y ahora la Audiencia ha confirmado la sentencia.
El tribunal deja claro que las supuestas dudas que la defensa del hombre intentó introducir en el relato de la mujer agredida quedaron «disipadas» tras el interrogatorio del fiscal. Además, dice que la declaración de la mujer quedó ratificada por los agentes, que declararon que la mujer salió del vehículo alterada y que pudieron percibir la marca roja en el brazo izquierdo, donde la había cogido el agresor.
También descarta de rebajar la condena a un delito de abuso sexual en vez de agresión sexual ya que la situación en la que se produjeron los hechos resultaba «intimidante»:
«La denunciante estaba en el interior de un vehículo en marcha, cuyo conductor se negaba a parar».
Asimismo, recalca que el acusado le tocó la vagina pesar de la oposición frontal de la víctima, lo que considera «un acto de violencia evidente». De hecho, el tribunal ratifica que la mujer «no consintió en ningún momento mantener ningún tipo de contacto sexual con el acusado».
Un solo año de cárcel para un hombre que agredió sexualmente a una prostituta
