Bélgica y España impulsan un mecanismo de alerta social a nivel europeo

Bélgica y España impulsan un mecanismo de alerta social a nivel europeo

Tenemos que recuperar «lo mejor de Europa», defendió Díaz al explicar este instrumento pionero que sitúa la cuestión social en el centro de las prioridades y valores del bloque comunitario. «La ciudadanía europea nos reclama ahora, en este mismo momento, una Europa social de verdad, donde la economía no sea incompatible con el trabajo digno», ha explicado la vicepresidenta.

La iniciativa hispano belga, en la que ya se han mostrado interesados varios países europeos, propone introducir en el sistema de funcionamiento ordinario y en la gobernanza de la UE un mecanismo que supervise la situación social de cada país, a semejanza del Mecanismo de Alerta Económico, instaurado para corregir desajustes económicos.

El Social Imbalance Procedure (SIP), el nombre que recibe en inglés, consiste en un sistema de indicadores sociales de control anual ideados con el fin de detectar, de forma adecuada y eficaz, posibles desequilibrios en el ámbito social, un terreno que abarca el empleo, la educación, la protección social y los derechos sociales.

Es «un instrumento que nos permitirá situar por primera vez por delante a las personas y reconciliar la justicia social con la eficacia económica en Europa», ha asegurado Díaz.

La iniciativa está en sintonía con el Plan de Acción del Pilar Europeo de Derechos Sociales, respaldado en la pasada Cumbre de Oporto, donde se comenzó a gestar esta propuesta.

Con el fin de situar las cuestiones sociales al mismo nivel de las económicas, Díaz ha destacado la necesidad de aparcar la pugna entre lo económico y social, para evitar caer en errores del pasado y evitar así que la cuestión social sea la gran perjudicada cuando se imponen criterios económicos.

«Es importante situar la dimensión social al mismo nivel que la económica», ha insistido Díaz. «El mecanismo de alerta social en el que estamos trabajando es la herramienta más eficaz para hacer realidad este indiscutible objetivo social. La cuestión social no puede estar supeditada a la finalidad económica y por ello necesita una formulación propia y un procedimiento propio», ha recalcado la vicepresidenta.

«Es necesario que trabajemos en este sentido», ha asegurado el ministro belga. Es necesario reforzar la dimensión social y este mecanismo es «una herramienta tangible para ello».

La ministra Díaz ha señalado que la crisis desatada por la pandemia ha puesto de manifiesto la necesidad de que exista un sistema eficiente de actuación pública de dimensión europea. La recuperación económica que ahora se afronta con los fondos europeos está comprometida con la igualdad la no discriminación y el trabajo digno. «El crecimiento europeo requiere una fuerte implicación social», ha asegurado.

«El mecanismo en el que estamos trabajando está destinado a jugar un papel fundamental en el desarrollo de la Unión Europa. En nuestras estrategias de futuro post pandemia nos corresponde también establecer las bases para una Europa social que asuma estos compromisos sociales con plena convicción», ha finalizado Díaz.

Bélgica y España impulsan un mecanismo de alerta social a nivel europeo