Uber: corrupción, impunidad, arrogancia, cobros indebidos y prepotencia

Uber: corrupción, impunidad, arrogancia, cobros indebidos y prepotencia

Cuando Uber entró en el mercado del transporte muchos estuvimos contentos por la, en ese entonces, disponibilidad de un transporte rápido, cómodo, limpio y de relativa economía y seguridad.

Sin embargo, durante los últimos dos años en mi experiencia, y de muchos conocidos, ha aparecido algo muy acorde con las políticas del gobierno, así como del comportamiento del pueblo “bueno y sabio”, esto es corrupción, prepotencia, e impunidad un comportamiento a todas luces abusivo.

Veamos cómo definimos las actitudes y comportamientos prepotentes

En el presente caso, se llama prepotente a una empresa o persona que se siente tan poderosa que, generalmente, impone su poder o autoridad para obtener un provecho o beneficio económico o de otra índole, siendo una característica propia de muchas empresas abusivas y déspotas.

A esta empresa Uber podemos señalarla como arrogante y egocéntrica porque se considera superior a los que se debe: a su clientela, violando el principio, la cimentación básica de la mercadotecnia: “El consumidor es el rey”.

Uber se ve a sí misma como centro en el mundo del transporte público (aunque no se sientan públicos), de todos, actuando de manera irrespetuosa hacia los que se atreven a mencionar o reclamar algún fallo.

Uber es una empresa prepotente, o al menos algunos de sus directivos lo son, con poca empatía o déspotas con su clientela, y esta es una de las principales causas de la pérdida de clientela convirtiéndose en un lastre para la sociedad.

Fallos que se iniciaron ya hace un tiempo, y siguen, es que una vez aceptado un viaje el “socio” o chofer lo cancela a última hora porque el cliente lo quiere cargar a su tarjeta de crédito, y ellos prefieren efectivo.

Otras veces al pagarles en efectivo alegan no tener cambio y preguntan si pudieran poner el saldo para acreditarse en el siguiente viaje. Si el cliente acepta, jamás verá su cambio.

Otro abuso, es que dicen que llegaron a hacer el viaje, cosa que nunca hicieron, teniendo el cliente que pagar el viaje como si fuera verdad.

Así mismo y como dramático ejemplo, hace unos días sucedió un incidente que me consta, es que después de solicitado un viaje, el “socio” chofer paró a media manzana de su destino, dio la media vuelta dejando al cliente esperando a media calle estando plenamente a la vista.

Al hacer la reclamación, el fulano (chofer) alegó que el cliente no llevaba mascarilla, algo totalmente falso. Nunca cruzó palabra alguna con él, y lo peor, por informar del incidente, el cliente fue dado de baja de Uber.

Afortunadamente para los ciudadanos están disponibles los taxis.

Ser prepotente es sinónimo de sentirse poderoso, dominador, opresor, superior.

El individuo o Uber en este caso muchas veces es señalado como arrogante y egocéntrico porque se considera superior a los otros, centro del mundo, de todos, actuando de manera irrespetuosa hacia los clientes con desprecio y ofensas. Como anillo al dedo para Uber.

Uber: corrupción, impunidad, arrogancia, cobros indebidos y prepotencia