Netanyahu vacila 12 horas y media antes de felicitar a Biden

Netanyahu vacila 12 horas y media antes de felicitar a Biden

Imagine a Benjamin Netanyahu sentado en la casa del primer ministro en Jerusalén cuando saltaron las noticias de quién había ganado las elecciones era Joe Biden.

Netanyahu no es más que político, y sabe que tiene que felicitar a Biden, pero también sabe que su querido amigo Donald Trump rechaza el resultado del pueblo estadounidense sin más, por lo que no puede apresurarse demasiado, ya que quiere quedarse del lado bueno del presidente y exprimirle acciones pro-Israel en las 10 semanas que quedan.

Es un cálculo cuidadoso. Cuando Donald Trump llame airadamente, Netanyahu quiere poder decirle a Trump que no tenía otra opción y que no lo tiró debajo del autobús.

Así que Netanyahu se mantuvo a raya durante 12 horas y media, incluso cuando decenas de líderes internacionales felicitaron rápidamente a Biden por su victoria:

Pedro Sánchez, Boris Johnson, Angela Merkel, Emmanuel Macron, el jefe de la UE, Justin Trudeau, Narendra Modi, Australia, Escocia, Grecia, todos actuaron a primera hora.

Netanyahu finalmente felicitó a Biden y Harris a las 12:03 am del día siguiente:

Felicitaciones @JoeBiden y @KamalaHarris. Joe, hemos tenido una relación personal larga y cálida durante casi 40 años, y te conozco como un gran amigo de Israel. Espero trabajar con ustedes dos para fortalecer aún más la alianza especial entre Estados Unidos e Israel.

Bueno, tal vez Netanyahu fue demasiado lejos en ese reconocimiento, por lo que rápidamente hizo un punto para agradecer a Trump, a las 12:17 a.m.

Gracias @realDonaldTrump por la amistad que nos ha mostrado al estado de Israel y a mí personalmente, por reconocer a Jerusalén y el Golán, por enfrentarte a Irán, por los históricos acuerdos de paz y por llevar la alianza estadounidense-israelí a alturas sin precedentes.

Netanyahu repitió ambas declaraciones en la reunión de gabinete de la mañana de ayer.

Y, Estados Unidos da a Israel más ayuda que cualquier otro país, a un nivel de 4.000 millones al año, establecido por la presidencia de Obama-Biden.

Netanyahu, que a nivel nacional está al filo de la navaja política frente a otros componentes de la derecha israelí, también sabe que una abrumadora mayoría de su electorado, judíos israelíes, estarán tan decepcionados como él porque Trump perdió.

¿Qué puede esperar Netanyahu del presidente del pato cojo?

Luz verde a cada vez más asentamientos, e incluso a medidas que hacen de la anexión de Cisjordania un hecho consumado, y más presión para que los países árabes firmen acuerdos de normalización.

Quiere hasta el último apoyo para el apartheid israelí que pueda obtener de Trump en las 10 semanas de transición antes de que Joe Biden preste juramento.

Para consternación de Netanyahu, ve que Trump hasta ahora está paralizado por las malas noticias y puede que sea incapaz de formular políticas en las próximas semanas.

La prensa estadounidense continúa encubriendo el entusiasmo abrumador de los judíos israelíes por Donald Trump, un hombre que, con razón, se considera que hizo la vida de los judíos en Estados Unidos más peligrosa.

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