'Muere' Huerta Valvuena, otro relacionado con la corrupción del PP

‘Muere’ Huerta Valvuena, otro relacionado con la corrupción del PP

José Luis Huerta Valbuena, amigo de Francisco Granados y uno de los pilares más importantes del caso Púnica, ha fallecido este jueves pasado debido a una enfermedad.

Valbuena era el gerente de Waiter Music, y estaba imputado por recibir adjudicaciones de manera privilegiada a través de la empresa y de inflar las facturas de los Ayuntamientos para repartirse las comisiones.

Waiter Music se hizo cargo de eventos de campaña del Partido Popular con grandes artistas, cabalgatas de los Reyes Magos, actos de Inauguración del Metro de Madrid, e incluso la propia comunión de la hija de Francisco Granados. De hecho, en su última declaración de 2018 admitió que existían pagos en B.

Su repentino fallecimiento no afectaría a la instrucción de la causa al encontrarse en una posición avanzada. Sin embargo, sí podría variar la estrategia de defensa.

Amigo de Francisco Granados y uno de los pilares más importantes del caso Púnica, se suma así a la ‘lista negra’ de políticos, arquitectos, jefes de prensa o constructores.

Miguel Blesa

El expresidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, tenía una condena en firme por las tarjetas black de 6 años, aunque se encontraba en libertad sin fianza ya que el juez así lo quiso por un comportamiento intachable durante el suceso.

El 19 de julio de 2017 fue hallado muerto en la finca «Puerto del Toro», en la localidad de Villanueva del Rey, Córdoba, de un disparo en el pecho producido por una escopeta de caza. El 20 de julio, la autopsia confirmó la hipótesis principal del suicidio.

Blesa había recurrido al Tribunal Supremo la sentencia dictada por la Audiencia Nacional y se había convertido en el acusado que más pena había sumado de todos los integrantes de la trama de las tarjetas black.

Por otra parte, también tenía una imputación por crédito fallido al Grupo Marsans.

Asimismo, también fue condenado por delito societario, apropiación indebida y falsedad documental por la compra fraudulenta del City National Bank de Florida. Tardo menos de 24 horas en pagar los 2,5 millones de euros de fianza.

Rita Barberá

La muerte por infarto de Rita Barberá fue otra más en una lista extrañamente larga de muertes que afectan a relacionados con la trama Gürtel y la financiación del Partido Popular.

La exalcaldesa de Valencia murió menos de 48 horas después de tener que comparecer ante el Tribunal Supremo para declarar sobre su posible pérdida de aforamiento e imputación en el caso Taula.

Cinco muertes y una caída

Pero antes que ella, otras personas relacionadas con el caso perdieron la vida o sufrido accidentes. No siempre en situaciones claras.

Este mismo año, en marzo, moría Leopoldo Gómez, un imputado poco mediático, pero un hombre que conocía al dedillo todo lo que había sucedido en torno a uno de los brazos más productivos de la trama: la ramificación de Pozuelo de Alarcón.

Leopoldo Gómez había sido arquitecto municipal de este municipio, el más rico de España, y era conocido como el cobrador de Jesús Sepúlveda, exmarido de Ana Mato, y durante los años de los maletines, alcalde de Pozuelo.

Gómez estaba imputado por delitos de prevaricación y cohecho y se había ganado ese ‘sobrenombre’ después de que se supiera, en declaraciones del ex Gal José Amedo a OKDiario, que se encargaba de cobrar deudas de constructores.

La extraña muerte de ‘el hombre’ de Javier Arenas

Más extraña aún resultó la muerte de Isidro Cuberos, que apareció en un barranco entre Mijas y Benalmádena, y donde habría caído con su moto. Imputado por el caso Jerez, Cuberos aparecía como una pieza clave para entender cómo había operado la trama Gürtel en Andalucía.

Cuberos tenía mucha influencia en el PP gracias a haber sido durante años el exjefe de comunicación, aunque en realidad era mucho más que eso, de Javier Arenas y también después del PP durante tres años mientras Arenas fue secretario general del partido.

El amigo de todos que sabía todo del dinero

Igualmente sorpresiva fue la muerte de un hombre clave en los movimientos del dinero producido por la trama. Francisco Yáñez, amigo personal de Luis Bárcenas y de los tesoreros anteriores a él, Álvaro Lapuerta y Ángel Sanchís, con los que había trabajado durante años, murió pocos días después de ser imputado y cuatro días antes de tener que ir a declarar ante el juez Pablo Ruz. Yáñez, durante años, había trabajado como contable para el PP.

Padre del apoderado de las cuentas en Suiza de Bárcenas, Yáñez estaba acusado por el entonces juez de la Audiencia Nacional de haber colaborado “en la ocultación del patrimonio opaco para la Hacienda Pública y de procedencia indiciariamente ilícita de Luis Bárcenas Gutiérrez y Rosalía Iglesias Villar con la finalidad de desvincularlo tanto de su origen como de sus verdaderos propietarios”.

Suicidio en un hotel

En enero de 2015 se produjo otra muerte en circunstancias no normales, relacionada con la Gürtel.

En un hotel de Bilbao apareció el cadáver de María del Mar Rodríguez Alonso a causa de lo que, se dictaminó por la policía, había sido un suicidio.

Esta mujer era la esposa del senador del PP Tomás Burgos Beteta, y el juez Pablo Ruz la había imputado por la utilización que la trama Gürtel habría hecho de su empresa MR&Asociados como tapadera de Francisco Correa, entre otros casos, en la organización de un Congreso de Parques y Jardines Públicos en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón.

La investigación concluyó que María del Mar Rodríguez Alonso se había suicidado, deprimida por el rechazo de los juzgados a sus repetidas peticiones de ser desimputada, y por la muerte del familiar de una amiga, a cuyo funeral había acudido a Bilbao.

Por último, también murió durante la investigación por la Gürtel el constructor José Martínez Núñez, dueño de Tecnología de la Construcción (Teconsa), a quien la burbuja y el escándalo de la propia trama, le costaron un imperio que llegó a facturar por encima de 6.000 millones de euros y contar con 650 trabajadores.

Un ‘dictador’ para quienes trabajaron con él, por sus métodos y formas, tanto en el trato personal como profesional, Martínez Núñez y su empresa había sido señalado ya como relacionado con Correa por el primer juez que llevó el caso, Baltasar Garzón.

Las «extrañas» caídas de Lapuerta

El propio extesorero popular Álvaro Lapuerta, sufrió dos caídas en extrañas circunstancias, que le dejaron en una situación física muy afectada.

La segunda de ellas, de hecho, casi le costó la vida, ya que pasó un tiempo en coma. Las secuelas de las caídas fueron argüidas por su defensa para retrasar o evitar comparecencias ante los diferentes jueces que instruyeron la causa.

En un comunicado que hicieron público los propios hijos calificaron como «de extrañas» las dos caídas, una en marzo de 2013, al poco de estallar en toda su plenitud el escándalo Bárcenas, y la segunda y más grave, en abril de ese año, ambas a la entrada de su domicilio.

Para añadir más ingredientes al asunto, hay que recordar que apenas medio año antes, Lapuerta había acudido a la policía para denunciar que había recibido llamadas amenazantes en las que se le decía que él ya era un hombre mayor, pero se le pedía “piensa en tus hijos y en tus nietos, ten cuidado con lo que haces”.

Muere el juez del caso Gürtel: Antonio Pedreira

Tras un accidente cerebral y 36 meses hospitalizado, el juez que investigó durante tres años el caso Gürtel, Antonio Pedreira, murió a los 66 años un caluroso 13 de agosto de 2015.

Con él, desapareció mucha información que estaba relacionada con el sumario más extenso que jamás se ha conocido en la historia de España.

Se suicida después de engañar a Correa: Juan Pérez Mora

Juan Pérez Mora era un comercial de productos dietéticos que se hizo pasar por juez para engañar al cerebro de la trama Gürtel, Francisco Correa, para afirmar que conocía de primera mano la deriva de la investigación.

Cuando estalló el caso y se vislumbraron las mentiras de Mora, el falso juez decidió suicidarse en verano de 2009.

José Martínez Núñez, el empresario que contrató a un sicario y después se suicidó

La lista es extensa, e incluye muertes por causas naturales, como la que sufrió José Martínez Núñez, investigado por beneficiarse de la Gürtel y por contratar a un sicario con el que estaba enemistado para acabar con su vida.

El sicario contratado por Núñez se ahorcó en el año 2000 tras escribir una carta en la que reconocía haber recibido el encargo de matar a Cuiña, el empresario con el que el imputado no guardaba buenas relaciones. El juez absolvió posteriormente al empresario.

En el momento de su muerte, Núñez había pasado también otra imputación en Gürtel por la concesión de una carretera de la que también quedó absuelto. No corrieron la misma suerte sus dos hijos, que ingresaron en prisión por su supuesta vinculación con la trama.

El hombre cercano a Correa y ‘El Albondiguilla’: Francisco Sánchez Arranz

Francisco Sánchez Arranz intentó adjudicar un contrato en condiciones muy ventajosas para empresas relacionadas con la Gürtel y en connivencia con Francisco Correa y Arturo González Panero ‘El Albondiguilla’. Cuando le imputaron, ya se encontraba muerto.

Sus tejemanejes en el Consejo de Administración de Iberia, le llevaron a recibir el curioso mote de ‘Paco Avión’. El juez quería que respondiese además por la adjudicación de una parcela pública a la constructora UFC S.A., en la que fue determinante la colaboración de Correa y ‘Albondiguilla’.

Tomás Villanueva sufrió un desvanecimiento inesperado antes de declarar

El exvicepresidente de la Junta de Castilla y León, Tomás Villanueva se encontraba reposando a las 4 de la madrugada del 9 de septiembre de 2017 en su residencia de Tordesillas, en Valladolid, cuando de repente sufrió un desvanecimiento inesperado y falleció.

Fue entonces cuando su hijo llamó al Servicio de Emergencias 112 para alertar de que su padre había perdido completamente el conocimiento y no respondía. Los médicos se personaron rápidamente en la vivienda, pero no consiguieron recuperar sus constantes vitales.

El exvicepresidente castellanoleonés estaba citado a declarar como imputado en los dos grandes casos de corrupción que afectan al Partido Popular de la región. El 19 de octubre tenía que acudir al juzgado por el caso Perla Negra y el 27 de noviembre por la Trama Eólica. No lo hizo: había fallecido en el mes anterior.

María José Alcón se cayó del balcón

La Guardia Civil encontró el cuerpo sin vida de la exconcejal del PP de Valencia María José Alcón, quien habría fallecido al precipitarse desde el balcón de su segunda residencia, en Callosa d’En Sarrià, en la provincia de Alicante, el pasado 16 de junio.

Alcón estaba imputada en el caso Taula sobre blanqueo de dinero y presunta financiación irregular del partido. La Guardia Civil, que no facilitó datos sobre este suceso, inició una investigación para determinar las circunstancias en las que se había producido esta muerte.

Alcón había reconocido las mordidas y la financiación ilegal del Partido Popular valenciano en una conversación telefónica con su hijo, y había llegado a hablar de que existía «corrupción total».

Rafael Naranjo murió antes del juicio y tras señalar a «un tercero»

Rafael Naranjo, antiguo presidente de Sufi, una empresa que mantuvo una estrecha relación con los Ayuntamientos de Boadilla del Monte, Majadahonda y Alcalá de Henares, así como varias localidades de Castilla y León, ha fallecido poco antes de ser juzgado por corrupción.

Los últimos años de Rafael Naranjo ya habían puesto sobre alerta al juez. Cuando la causa quedó a la espera de juicio, en noviembre de 2016, el empresario había enfermado y un médico le había diagnosticado «demencia sobrevenida», el mismo problema que sufrió el extesorero del PP y también imputado en Gürtel, Álvaro Lapuerta.

El juicio sobre lo ocurrido en Boadilla del Monte tiene además otros problemas similares. Por ejemplo, cuando el juez De La Mata citó en 2015 a un exconcejal del Ayuntamiento como imputado en la trama. Tuvo que deshacer su decisión porque ese político había muerto varios meses atrás.

Enrique Olivares sufrió un ictus antes de acudir a declarar

Enrique Olivares, el falso cura que secuestró a la familia de Bárcenas el 23 de octubre de 2013 tras cobrar 50.000 euros de fondos reservados del Ministerio del Interior, no pudo declarar contra el PP.

La Justicia cree que recibió un encargo para eliminar información contra Mariano Rajoy, Soraya Sáenz de Santamaría, María Dolores de Cospedal y Javier Arenas.

Así se recoge en el sumario de la Operación Kitchen, una pieza incluida en el Caso Villarejo, y que ha supuesto una condena de 22 años de prisión para Olivares.

A pesar de los deseos de ‘tirar de la manta’, Olivares cuenta con una situación complicada y no podrá confesar detalles, acusaciones ni siquiera declarar en el juicio. El ictus que sufrió en los meses previos al estallido del caso, en la prisión de Cuenca, le impide expresarse con normalidad y, cuando lo hace, incurre en continuas incoherencias.

Por ello se encuentra en el módulo de enfermería y se está deteriorando por momentos. Está catalogado como enfermo crónico y el pronóstico para los próximos meses no es especialmente positivo.

Muere Enrique Álvarez Conde por una infección causada por el tratamiento de un cáncer de pulmón

El profesor que dirigía el Instituto de Derecho Público, Enrique Álvarez Conde, falleció el 1 de abril. Estaba imputado en el caso máster y la Fiscalía solicitaba tres y nueve años de prisión. El fallecimiento se produjo como consecuencia de una infección que le provocó el tratamiento contra el cáncer pulmón que padecía.

Conde había comparecido el pasado mes de febrero en la comisión de investigación de universidades de la Asamblea de Madrid. Allí aseguró que había actuado de manera legal y que achacó su error a una supuesta incapacidad a la hora de resistir las «fuertes presiones» ejercidas por parte del Rectorado y la Comunidad de Madrid tras el caso máster.

Además, declaró que no tenía los trabajos de Pablo Casado para demostrar que cursó sus estudios en ese centro.

‘Muere’ Huerta Valvuena, otro relacionado con la corrupción del PP