Lesmes hace crecer la confrontación y nombrará diez jueces más a pesar de tener el mandato caducado
El pleno del Consejo General de Poder Judicial (CGPJ) debatirá y votará hoy el nombramiento de diez plazas de jueces, seis de los cuales del Tribunal Supremo y de fuerza relevancia.
Como el CGPJ tiene el mandato caducado desde finales del 2018, en un principio se había acordado que estos nombramientos serían congelados a la espera de un acuerdo entre los partidos para renovar el órgano judicial.
Pero su presidente, Carlos Lesmes, ha salido adelante con los nombramientos, decisión que hace crecer la tensión en la guerra abierta con la Moncloa.
Lesmes está molesto con el gobierno por haber recomendado a Felipe VI que no asistiera al acto de entrega de despachos del CGPJ en Barcelona, dado que podía coincidir con la sentencia de la inhabilitación del presidente de la Generalitat, Quim Torra.
Según explica Eldiario.es, Lesmes, que quería salvar la presencia del rey en el acto, llegó a amenazar al gobierno de Sánchez que la notificación de la sentencia coincidiría con el aniversario del 1-O.
Finalmente, no fue tan allá, pero en la entrega de despachos no se ahorró los elogios a la corona y explicó públicamente que Felipe VI le había llamado para comunicarle que quería ir al acto.
El Gobierno interpretó este posicionamiento como un pulso de la justicia y la monarquía con el ejecutivo de Sánchez.
Paralelamente, el PP, partido que nombró a Lesmes, bloquea una renovación del CGPJ que no le favorece.
De este modo, el partido de Casado puede mantener una estructura judicial que los últimos años ha seguido una línea determinada.
Lo explicaba así Jaume Asens en una entrevista a VilaWeb:
‘Lesmes fue director general de Justicia durante ocho años con el PP. Y eso no es ni anecdótico ni circunstancial. Porque responde a una estrategia de fondo, que viene de lejos. Recuerde, por ejemplo, cuando el portavoz del PP en el Senado Ignacio Cosidó afirmaba, hablando de la renovación del CGPJ: ‘Nos jugamos nombramientos vitales por el PP’.
Si el PP se opone a la renovación, tiene la sartén por el mango.
Los números son claros. El CGPJ lo forman veintiuna personas, es decir, veinte vocales más el presidente. De estos, doce, más de la mitad, fueron propuestos por el PP en 2013, cuando Rajoy tenía mayoría absoluta en el congreso.
La última palabra sobre el caso Gürtel o el caso de los ERE de Andalucía
Entre las plazas que se renovarán hoy, existe la presidencia de la sala tercera, vacante porque este mes terminó el mandato de Luis María Díez-Picazo; la presidencia de la cuarta y la quinta, los titulares de las que se jubilaron en junio; y tres plazas de magistrado de la sala segunda, después del retiro de Luciano Varela, Franciscio Monterde y Alberto Horge Barreiro.
Estos tres nuevos magistrados de la sala segunda deberán tomar decisiones relevantes sobre el caso Gürtel y el caso de los ERO de Andalucía. Asimismo, esta misma sala deberá decidir sobre una investigación de el rey emérito Juan Carlos I.
Entre los aspirantes iniciales a ocupar estas plazas y que quedaron excluidos, destacan dos jueces de instrucción de la Audiencia Nacional, José de la Mata -que actualmente instruye varias de las causas más complejas, como son los casos Pujol, los papeles de Bárcenas y el 3% – y el ex-concejal del PP en Madrid María Tardón.
También ha quedado fuera Eloy Velasco, que fue quien comenzó la instrucción de los casos Púnica y Lezo. Sin embargo, todos ellos pueden ser propuestos por cualquier vocal del pleno para que los vuelvan a considerar.
Lesmes hace crecer la confrontación y nombrará diez jueces más a pesar de tener el mandato caducado
