Juan Carlos I presenta una declaración en Hacienda para evitar la investigación de las tarjetas opacas
Entre los problemas judiciales que pueden preocupar al rey Juan Carlos, hay uno relacionado con el uso de tarjetas bancarias opacas, posterior a la abdicación del año 2014, cuando ya no tendría inmunidad.
La Fiscalía del Tribunal Supremo investiga el uso de estas tarjetas, que no eran de cuentas del monarca, sino del empresario mexicano Allen Sanginés-Krause, que puso el dinero a disposición del rey emérito y su familia.
Este dinero para regalos y gastos personales de la familia real no se declararon a Hacienda y ahora el abogado del rey Juan Carlos, Javier Sánchez-Junco, lo quiere resolver con una declaración voluntaria para regularizar la situación fiscal, según publica El País.
La Agencia Tributaria debe decir los próximos días si la acepta o necesita aclaraciones y cuánto dinero deberían pagar, según fuentes cercanas al caso, que cita el diario.
Las tarjetas se habrían utilizado entre los años 2016 y 2018 y el importe defraudado superaría los 120.000 euros en algunos ejercicios, que es el límite para que se considere delito fiscal, castigado con penas de hasta cinco años de prisión.
La declaración voluntaria se puede presentar en cualquier momento antes de que la Agencia Tributaria abre una investigación o un juez cite a declarar como investigado por presunto grado fiscal o blanqueo de capitales.
La Fiscalía del Supremo también investiga la presunta corrupción relacionada con el AVE a la Meca, una causa que tiene muchas posibilidades de ser archivada, porque no se ha podido probar suficientemente la implicación del rey emérito que, además, en 2012 todavía era rey y, por tanto, inviolable.
Hace un mes, la Fiscalía también abrió una tercera línea de investigación para actividades financieras supuestamente opacas del padre del rey Felipe VI.
Hace cuatro meses que Juan Carlos I se fue a los Emiratos Árabes.
Juan Carlos I presenta una declaración en Hacienda para evitar la investigación de las tarjetas
